Terapia corporal integrativa: estabilización a través de la conciencia corporal
El Terapia corporal integrativa Es un enfoque holístico que entiende el cuerpo como una puerta de entrada directa a los procesos emocionales, mentales e inconscientes. Basado en conocimientos modernos de la terapia, la neurobiología y el trabajo corporal, combina la consciencia plena del cuerpo con ejercicios específicos, técnicas manuales y apoyo psicoterapéutico. El objetivo es identificar y resolver la tensión crónica, los bloqueos emocionales o las quejas psicosomáticas en la memoria corporal.
En el proceso terapéutico los pacientes aprenden:
- arriba ejercicios de movimiento y respiración conscientesPara sentirse mejor de nuevo y calmar el sistema nervioso
- a través de trabajo corporal psicológico profundoReconocer y trabajar las tensiones emocionales en el tejido o la postura.
- con Soporte táctil y manual Para liberar viejos patrones de estrés o protección y abrir nuevas experiencias físicas.
- a través de ejercicios de estabilizaciónPromover la autorregulación, el arraigo y la seguridad interior.
La terapia corporal integrativa entiende al ser humano como una unidad de cuerpo, mente y psique. Los síntomas no se tratan de forma aislada, sino que se consideran en el contexto de patrones biográficos, emocionales y físicos.
Áreas de aplicación
La terapia corporal integrativa puede brindar apoyo y estabilización para:
- estrés crónico y agotamiento
- Ansiedad, trauma y trastornos somatoformes
- molestias físicas inexplicables (por ejemplo, problemas gastrointestinales, mareos, síndromes dolorosos)
- Problemas de tensión o postura
- Depresión y vacío interior
- Trastornos alimentarios o alteración de la imagen corporal
- Procesos de integración tras terapia o experiencia traumática
- Fortalecimiento de la autoconciencia y la presencia
En nuestro trabajo en Las Almas Integramos la terapia corporal como parte integral de un concepto de tratamiento integral, adaptado a la historia de vida, el diagnóstico médico y los objetivos psicoterapéuticos de cada persona. El cuerpo se considera no solo un portador de síntomas, sino la clave para la autoestabilización y el equilibrio interior.